
«The New book of the Dog; a comprehensive natural history of British dogs and their foreign relatives, with chapters on law, breeding, kennel management, and veterinary treatment» (1907)» … Escrito por Robert Leighton, este bello papillón pertenecía a Madame Moetwill (afincada en Bruselas), aunque el autor comienza una muy interesante diatriba sobre si es un spitz, pom, un papillón o un spaniel: «Un pequeño perro atractivo es el Papillon o Squirrel Spaniel. En general, se considera que es un perro belga, posiblemente porque allí habitan en mayor número que en cualquier otro lugar, pero no es factible decir que sea nativo de Bélgica. El hecho de que se le llame ‘Epagneul’ puede indicar que sea de origen español. No es un Spaniel propiamente dicho, al igual que el Pekinés no es un verdadero Spaniel. Uno podría aventurarse a confirmar que es un descendiente del perro faldero de pelo sedoso que los españoles trajeron de México en el siglo XVI, y que pudo llegar a los Países Bajos. Ciertamente, no es un perro nuevo… Se pueden ver en las pinacotecas españolas, como también en las pinturas de W’atteau, Fragonard y Boucher. Madame de Pompourour tenía a Inez, y María Antonieta era aficionada a esta diminuta raza. El nombre de Papillon hace referencia a sus orejas, que se destacan grandes y avispadas como las alas de una mariposa, y muy emplumadas… Son perritos muy delicados y sensatos, con una abundante capa de pelo largo y sedoso. Los ojos, oscuros, son redondos y fijos.»