
En 1907, el sultán Abdulhamid II, que por entonces decían de forma exagerada que tenía setecientas mujeres (entre esposas, concubinas y consortes), quería probar perros como centinelas para dedicarlos a sus asuntos ‘oficiales’ de control. Encargó al experto entrenador de perros de guerra, Edwin Haunteville, que adiestrara animales adecuados en número que fuera necesario. Desde Reino Unido, Edwin envió a a la collie Laddie, y al bloodhound Warrior, que fueron trasladados en el Orient Express y así llegaron a Constantinopla un mes después de la petición.
1907 es el mismo año en el que fue condecorado Conan Doyle por el mismo sultán Abdülhamid II, con la Orden de Medjidleh, y con la de Chefakat (tanto a él como a su esposa Louise Hawkins), en visita privada a Selamlik.