Era conocida como The Queen of the Jungle, jamás utilizó dobles en escenas con animales, salvo las que tenían relación con la domadora de felinos Olga Celeste (King of the forest, Wild animal…). Desde 1915 fue amiga de todos los residentes de aquel atribulado y complejo zoo de la productora Selig. En ese mismo año de 1915, la actriz recibió de sus admiradores cinco canarios, dos monos, dos loros, tres gatos de angora, un gato siamés, mesas, cojines, lienzos, poemas y catorce perros… Un año después, es posible que su constante aullador Fluffy, un caniche toy, participara en el filme Devil, the servant and the man.