Napoleón en Peacock Alley

«Asoman las actrices con sus propios perros en The Gilded Lily (1921, y guión de Clara Beranger), con los dos galgos rusos de la actriz Mae Murray, que actúa también en Peacock Alley (1922) junto al caniche (toy) Napoleón, y desde su propia compañía (Tiffany Productions); quién sabe si el pequinés que la acompaña en el filme On with the dance (1922) fuera también de ella, lo mismo que el pequeño ‘mestizo’ en The merry widow (Manitas de diamante, de 1925, en origen un musical), con dirección de Erich Von Stroheim, donde se narra la vida de un perro de lujo en Park Avenue (Nueva York). Así que esa actitud superficial de tener perro, y un perro concreto, y de tenerlo cerca, o tenerlo cercano, que con tanto desdén suelen mencionar, no fue una elección tan superficial.» (en Perrillos del Halda)


Deja un comentario